Vinos de crianza
El equilibrio perfecto entre aromas y sabores frutales
¿Qué son los vinos de crianza?
Los vinos de crianza son una categoría de vinos que se caracterizan por su proceso de envejecimiento controlado, lo que les otorga sabores y aromas más complejos y sofisticados.
Este tipo de vinos pasa un tiempo tanto en barrica de madera (generalmente roble) como en botella antes de salir al mercado.
¿Qué caracteriza a los vinos de crianza de Familia Fernández Rivera?
Viñedos versátiles, el corazón de los vinos de crianza
Los vinos de crianza de Familia Fernández Rivera destacan por su equilibrio entre los aromas y sabores frutales propios de la uva y las notas más complejas aportadas por el envejecimiento en barrica de roble. Esto los convierte en una categoría intermedia entre los vinos jóvenes y los vinos de reserva o gran reserva, con cualidades únicas que los hacen muy versátiles.
1. Tiempo de envejecimiento
El proceso de crianza sigue estrictos criterios de tiempo y condiciones para garantizar la calidad del vino:
- Mínimo de 2 años de envejecimiento total.
- 6 meses en barrica de roble: este tiempo permite que el vino adquiera características como taninos suaves, mayor estructura y aromas complejos.
- Resto en botella: en la botella, el vino madura y desarrolla sus aromas terciarios, logrando un equilibrio final.
En algunas regiones y estilos, el tiempo en barrica puede extenderse, pero no supera el necesario para mantener la frescura y el carácter frutal del vino.
2. SABORES Y AROMAS
La combinación del paso por barrica y botella proporciona a los vinos de crianza una amplia gama de aromas y sabores:
- Aromas de crianza (barrica): la madera de roble aporta:
- Notas de vainilla.
- Toques tostados o ahumados.
- Aromas de especias como canela o clavo.
- Sensaciones de cacao o café en algunos casos.
- Aromas frutales: los más comunes incluyen frutas rojas (cereza, frambuesa, fresa) o frutas negras (mora, ciruela), dependiendo de la variedad de uva utilizada.
- Evolución en botella: con el tiempo, el vino desarrolla aromas terciarios como cuero, tabaco, o incluso notas balsámicas (eucalipto, regaliz).
En boca, los vinos de crianza suelen ser:
- Equilibrados: tienen una acidez moderada y taninos redondeados.
- Persistentes: ofrecen una sensación prolongada después del trago.
- Estructurados: poseen cuerpo medio a pleno, pero sin la intensidad de un vino reserva o gran reserva.
3. ESTRUCTURA Y TEXTURA
- Taninos: los taninos, que provienen de las pieles de la uva y la barrica, están presentes pero son más suaves que en un vino joven o un reserva. Esto les da una sensación más redondeada y aterciopelada en boca.
- Acidez: suele ser equilibrada, lo que permite que el vino conserve frescura a pesar de su envejecimiento.
- Alcohol: generalmente en niveles moderados (13-14%), aportando calidez pero sin ser dominante.
4. VARIEDADES DE UVA COMUNES EN LOS VINOS DE CRIANZA
El estilo del vino de crianza depende de las variedades de uva utilizadas, que aportan distintas características:
- Tintas:
- Tempranillo: base de la mayoría de los vinos de crianza en España, aporta notas de frutas rojas, especias y una estructura equilibrada.
- Garnacha: contribuye suavidad, toques de frutos maduros y aromas herbáceos.
- Cabernet Sauvignon y Merlot: utilizadas en mezcla, aportan complejidad y taninos más firmes.
- Blancas: menos comunes, pero pueden ser crianzas de Chardonnay, Viura o Albariño, con notas de fruta madura y toques cremosos aportados por la madera.
5. REGIONES VINÍCOLAS COMUNES DE LOS VINOS DE CRIANZA
- Rioja: líder en vinos de crianza, con un balance característico entre fruta, acidez y madera.
- Ribera del Duero: crianzas más intensos, con sabores de fruta negra madura y mayor estructura.
- Navarra y La Mancha: opciones con una buena calidad y frescura en la uva.
6. BENEFICIOS DEL ENVEJECIMIENTO EN BARRICA DE ROBLE
La barrica tiene un papel crucial en los vinos de crianza:
- Permite una microoxigenación lenta que suaviza los taninos y estabiliza el color.
- Aporta compuestos que enriquecen el vino con aromas especiados y tostados.
- Mejora la longevidad del vino al reforzar su estructura.
¿Cómo reconocer un vino de crianza?
En las botellas suele indicarse la palabra «Crianza» en la etiqueta. Además, en algunas regiones, como Rioja, las contraetiquetas suelen ser de colores específicos según la categoría, siendo generalmente rojas.